Una de las situaciones más temidas por un propietario a la hora de alquilar una vivienda son los impagos por parte de los inquilinos. En los últimos años el mercado de alquiler ha crecido mucho pero también se ha creado cierta incertidumbre debido a la aprobación y posterior derogación del Real Decreto Ley de Alquileres. Esto ha disparado la demanda informativa sobre los seguros de impago de arrendamiento, es decir, cada vez son más los propietarios que apuestan por alquilar una vivienda pero contando con el respaldo de un seguro de protección de alquiler.
Este tipo de seguros, afirma Grupo Quílez, ofrece la posibilidad al propietario de una vivienda de contar con un apoyo legal para que en caso de impagos por parte de un arrendatario poder recuperar su dinero del alquiler. Es decir, un seguro de impago de alquiler es una de las mejores soluciones para todas las personas que quieran ceder en alquiler algún piso o casa para combatir la morosidad. Ten en cuenta que elegir un buen seguro es tan importante como elegir un buen inquilino.
Por ello, lo primero que debes ver es que coberturas ofrecen las aseguradoras, en la mayoría de los casos este seguro incluye los desperfectos en la vivienda, la defensa y reclamación en contratos de arrendamiento, reclamación en pólizas, defensa penal, reclamación de daños, reclamación en contratos de reparación o mantenimiento y asistencia jurídica telefónica. Además, te ayudan a elegir al inquilino adecuado con estudios de viabilidad.
Si un propietario se enfrenta a un impago, lo primero que debe hacer es notificarlo a la aseguradora y será a partir de ese momento cuando se active el proceso judicial para presentar una demanda de desahucio junto con la reclamación de las rentas. Normalmente este tipo de póliza cubre hasta un límite de 6, 12 o 18 meses, pero dependerá de la aseguradora, al igual que el pago adelantado del total de las rentas impagadas por el inquilino.
Estos seguros, además, suelen ser asequibles para la mayoría de los propietarios. Si quieres saber el precio del seguro para tu vivienda de alquiler tienes que calcular el coste medio de la contratación de este tipo de seguros, es decir, hay que contar entre un 3% y un 5% de la renta anual del piso alquilado. Por ejemplo, si el precio del piso es de 600 euros mensuales, el precio del seguro rondará entre los 250 y 400 euros anuales.
Si eres propietario de una vivienda, en Grupo Quílez te ofrecemos la posibilidad de contratar un seguro de alquiler para que en caso de impagos por parte de un inquilino poder recuperar las mensualidades atrasadas.